Cambio climático

Más exigencias de capital por la banca, retribución adecuada de los depósitos, retorno al Banco Central de buena parte de la deuda contraída durante el Covid. Estos son los trabajos a realizar por exigencia de Bruselas a los que habrá que añadir el retorno a los peajes para el 2024.

¿Cómo puede ser que año tras año el PIB del turismo siempre se mantenga en el mismo porcentaje? Nos referimos al repetido 12%, deberíamos tener claro lo que se entiende por turismo como sector creador de riqueza y empleo, qué subsectores incluye y qué actividades económicas están directa e indirectamente relacionadas con la atención de los visitantes ocasionales y, muy especialmente con los que proceden de otros estados y continentes.

A pesar de todos los inconvenientes que dicen generar a los ciudadanos, este sector es clave en el crecimiento económico y, muy especialmente en una economía donde el terciario es mayoritario en afiliaciones a la seguridad social, que significa empleo y participación en el PIB del consumo privado que genera.

Cataluña crece en lo que llevamos de año en gasto por turista cerca del 36%, pese a que tanto los rusos, por las circunstancias ya conocidas, como los chinos se espera que lleguen en el mes de agosto, por problemas de apertura , de visados ​​y vuelos directos, ambos países eran considerados como exportadores de turistas de alto poder adquisitivo por el gasto que hacían en compras de artículos de lujo, para entendernos las que se hacen en las tiendas de las marcas ubicadas principalmente en el Paseo de Gracia de Barcelona, ​​que a pesar de todo, sigue siendo líder en ventas Tax Free realizadas en el territorio del Estado español.

Los coreanos, los británicos de origen asiático, los mexicanos, los turistas sur americanos y muy especialmente los procedentes de EE.UU., han ocupado con éxito el puesto de liderazgo de las dos nacionalidades antes mencionadas, es decir, rusos y chinos. Turismo y sostenibilidad, colaboración publica – privada y otras expresiones, se hacen imprescindibles cuando se habla del primer sector económico de nuestro país.

Las rebajas, iniciadas esta temporada antes de Sant Joan, se han convertido en un desenfreno generalizado. El consumidor desorientado, estaba acostumbrado a principios de julio y, muy especialmente en el primer domingo del mes, y ahora, no sabemos hacia dónde vamos. Las de verano siempre serán diferentes a las de invierno, pero ahora más valdría introducir la liquidación al fin de temporada y el resto que fueran ofertas y promociones de verano y antes de vacaciones. Es una obviedad decir que la gente vuelve a las tiendas, esto ocurre cada año cuando entramos en verano, cuando las escuelas terminan el curso y cuando las horas de luz natural se alargan. Pero esto no quiere decir que las compras del ecomerce pierdan ritmo. Más bien cabe decir que relantizan el crecimiento de su cuota de mercado.
Los datos macro de la Eurozona siguen muy preocupantes, especialmente los que hacen referencia a Alemania, el país de la Eurozona exportador industrial por excelencia. La balanza comercial, en junio, se presenta como deficitaria, es decir, más importaciones que exportaciones.

La inflación se mantiene por encima de los tipos de interés del BCE. Por otro lado, la problemática social que está sufriendo el país vecino -Francia- es un síntoma de las desigualdades sociales y de la falta de integración de determinadas culturas en las del país que en su día fue de acogida. En definitiva, una situación preocupante en una coyuntura económica y social llena de incertidumbres.

Los índices de producción industrial y de confianza empresarial en lugar de crecer presentan ligeras disminuciones. En definitiva veremos en otoño si vamos hacia la recuperación o entramos en la recesión.

China no acaba de arrancar y su crecimiento es muy inferior al de antes de la pandemia. Los estímulos monetarios con la rebaja de los tipos de interés no producen a los efectos esperados, la deflación continua y la demanda interna paralizada. Las exportaciones en el mes de junio bajista, es su punto fuerte. Resumiendo, la fábrica del mundo está medio detenida.

En EEUU la inflación en junio ha descendido al 3% interanual, en España el 2%, pero los alimentos frescos siguen altos por encima del 5%. La actuación de Rusia en relación a la guerra de Ucrania no ayudará nada y, los efectos de la sequía se continuarán haciéndose sentir en los meses que permanecen hasta final de año. Por lo general podríamos decir que nos encontramos ante una situación extraña. Antes decíamos incierta, tanto aquí, como en todos los países, nacionalidades y continentes.

Los actores, actrices y guionistas de la llamada meca del cine hacen huelga por culpa de la Inteligencia Artificial. Está de moda pedir su regulación. Mientras Bruselas ha impuesto una multa millonarios a Google por mala praxis en la utilización de los datos y, la Comisión Nacional del Mercado de la competencia española ha hecho lo propio con Amazon y Appel por distorsionar el mercado. En definitiva, el mundo neoliberal pierde potencial en un mercado que necesita regulación para evitar y afrontar las posiciones de dominio que las denominadas nuevas tecnologías imponen en un mercado global.

El turismo de sol y playa, el que nos ayudó en la larga etapa de la autarquía, el de pleno verano, presenta novedades en sentido negativo. Éramos muy optimistas en cuanto a número de visitantes y gasto por turista, pero las primeras apreciaciones no son lo que pensábamos. El cambio climático junto con la coyuntura de los países líderes de Europa, acompañados de la pérdida de poder adquisitivo de los antes denominados países del este, han provocado que en julio los alojamientos, pero especialmente los alternativos, es decir , apartamentos y camping, pero también la ocupación y capacidad hotelera no alcanzan las cifras del pasado año, los fines de semana mucha movilidad de proximidad pero el resto de la semana demasiada tranquilidad. La pregunta que debemos hacer es si es una situación ocasional o un cambio de actitud de los ciudadanos como consecuencia del calor por el cambio climático. La oferta es la más adecuada en calidad y precio para atender a un turista cada vez más exigente. Estamos preparados por la situación que nos toca vivir.

La otra cara de la moneda la presenta el turismo urbano, ahora sin el turismo profesional, pues estamos en su época valle, de este importante grupo muy bien considerado por el sector hotelero de Barcelona.

Por último, y antes de desear unas buenas vacaciones, cabe decir que después de las Generales, Cataluña puede ser y debería ser decisiva al potenciar sus actividades económicas, todas ellas y, especialmente, la competitividad fiscal.

Aprovechamos las vacaciones para asistir a conciertos de todo tipo. Somos especialistas de verdad y como siempre es necesario compartir para competir. Vamos.

Santi Pagés
Economista